Seguro has escuchado del legendario Gran Premio de Macao que se celebra en las estrechas calles de la capital mundial del juego. Pero, ¿es Macao uno de los mejores circuitos urbanos del mundo?
Mónaco
1 minutos
Gran Premio de Mónaco
Mónaco es el hogar de muchos pilotos de F1. Brendon da una vuelta por las calles de Mónaco mientras se mete en el simulador, con F1 2017 de Codemasters, y habla de su 2ª carrera en casa.
Es el abuelo de todos los circuitos urbanos y lo decimos de manera literal pues se corre allí desde 1929. La pista fue diseñada por Antony Noghes, hoy un concepto así sería imposible. Como homenaje al creador, la última pista del circuito lleva su nombre. Por desgracia no es un viraje muy especial, como podría ser la horquilla Loews (que obliga a los autos a montar una dirección que gira más) o la chicane del Puerto, donde Alberto Ascari se equivocó en 1955, terminando en el agua, por suerte sin lesionarse de gravedad.
Macao
No es ninguna casualidad que Ayrton Senna y Michael Schumacher hayan ganado aquí. No hay muchos lugares que hagan que Mónaco parezca fácil, pero Macao es uno de ellos. La pista de 6,12 km de la antigua colonia portuguesa es tan temible como la Inquisición. Se trata de un cóctel de curvas rápidas, asfalto resbaladizo y vallas de seguridad al lado de la pista. Es, probablemente, el circuito más épico de la actualidad. Las cosas se pueden torcer enseguida, como puedes ver aquí...
Pau
La Fórmula 3 disfruta de algunos de los mejores circuitos. Y eso que pensábamos que la F1 era la cumbre del deporte del motor. Los F3 son algo más compactos por lo que se pueden enfrentar a lugares increíbles como Pau. En el circuito del sur de Francia han ganado estrellas como Fangio. La pista tiene un poco de todo: rectas, una horquilla y algunos baches feroces. Todo ello en medio de la que es probablemente la ciudad más bonita de todas en las que se celebra una carrera. No te lo pierdas:
Madonie
Técnicamente el Circuito delle Madonie (de 72 km) más conocido como Targa Florio es un circuito urbano. Se trata de un viaje terrorífico a través de los pueblos y las montañas de Silicia. Posiblemente es el circuito más peligroso de la historia, que requiere un valor similar a ponerte delante de un toro de lidia. Así que no es ninguna sorpresa que se prohibiera a partir de 1977. Al ser un circuito urbano la pista todavía existe, algunas partes se emplean en el Rally Targa Florio Rally, que nos da una idea de la locura que debió ser la carrera original.
Long Beach
¿Hay otro circuito donde un transatlántico sea parte de él? En Long Beach, el Queen Mary preside la acción, pues desde 1967 ha sido reconvertido en un hotel flotante. Menos de 10 años después llegó la Fórmula 1 en 1976. La pista no se parece a ninguna otra con curvas a 90 grados y una gran recta que termina en una amplia horquilla. La F1 terminó en 1983 con un récord increíble: en la era de los motores turbo, nunca un coche con esa tecnología ganó en Long Beach. Desde entonces es una carrera de la Indy. Al contrario que en la F1, sus carreras sí que se ponen en YouTube. Mira la de 2016:
Vila Real
Sir Stirling Moss dijo de Vila Real en Portugal que era una de sus pistas favoritas. Se trata de una auténtica montaña rusa a través de esta ciudad a orillas del río Duero al norte de Portugal, donde no falta un estrecho puente. El circuito todavía se usa en el Campeonato del Mundo de Turismos, aunque se ha eliminado la caída que podría suponer el puente. Sin embargo, el circuito actual mantiene el espíritu de antaño con rasantes ciegos y sin escapatoria. Se parece un poco al Nordschleife alemán. El antiguo campeón de WTCC, Rob Huff, nos da una vuelta.
Las Vegas
América siempre hace todo a lo grande por lo que no se entiende muy bien que se haya llegado a celebrar el GP de F1 en un parking. Aunque no es un parking cualquiera: sino el del Caesar’s Palace. Aunque el GP sólo se celebró en 1981 y 1982. No había circuitos permanentes en Las Vegas (de hecho no había en toda Nevada). Así que se hizo un circuito usando bloques de hormigón, algo parecido a un súper karting. Los pilotos dijeron que la pista era algo confusa pues nunca se veía bien la siguiente curva. A pesar de ello Nelson Piquet tiene buenos recuerdos pues en 1981 ganó allí el título. Allí fue la última victoria del equipo Tyrrel, que triunfó con Michele Alboreto en 1982. Ese año Diana Ross fue la encargada de dar los trofeos
Birmingham
Vale, lo admitimos. Este lugar quizá no tiene el sabor de ‘Monza’, ‘Indy’, o ‘Daytona’. Pero Birmingham nos ofreció cuatro carreras maravillosas entre 1986-1989, que fueron conocidas como Birmingham Super Prix. La pista era el ejemplo perfecto de que siempre es posible hacer un circuito urbano cuando hay voluntad de ello. ¿Veremos un GP de Londres? Aquí tienes una vuelta al trazado.
Montjuich Park
Fue donde se celebró el GP de España desde 1968, alternándose con el Jarama hasta 1975, cuando ya se dejó por motivos de seguridad. La verdad es que era peligroso pero absolutamente bello y espectacular, serpenteando a través del parque de la ciudad que fue anfitriona de los juegos olímpicos de Barcelona 1992. Montjuich a veces ha estado salpicado por la polémica. En una ocasión los pilotos se pusieron en huelga porque las barreras no estaban bien cogidas con tornillos. Al final los mecánicos de todos los equipos se pusieron de acuerdo y lo hicieron ellos mismos a lo largo de la pista de 3,79 km. El GP de Montjuich de 1975 ha sido la única vez en la que una mujer ha puntuado en la F1. Lo consiguió Lella Lombardi.
Adelaide
Se conoce como el mejor circuito en el que se ha celebrado un GP de Australia. Adeilaide siempre ha sido espectacular. Uno de los momentos más famosos fue en 1986 cuando Nigel Mansell sufrió un espeluznante reventón en el neumático trasero izquierdo cuando faltaban 19 vueltas para el final. Ese percance le costó ese año el título del mundo. La pista va a lo largo de un parque con una recta muy larga, donde siempre es difícil encontrar el ritmo. Adelaide ofrecía un poco de todo. La superficie era famosa por sus baches lo que suponía un reto todavía mayor, pero así y todo se trataba de un lugar mágico que lo convertía en unas de las pistas favoritas de los pilotos. Mira el momento que Nigel Mansell quisiera olvidar.