Mujeres en la F1 Maria Teresa de Filippis
© Popperfoto/Getty Images
F1

Te presentamos a las mujeres más veloces del mundo

Descubre las cinco féminas que han desafiado a los hombres para formar parte de la Fórmula 1.
Por Lluís Llurba
4 minutos de lecturaPublished on
No es fácil ser mujer en un mundo de hombres, pero las hay que no se arrugan y desafían las normas establecidas para hacer realidad sus sueños. Nos atreveríamos a decir que el mundo de las carreras en general, y la Fórmula Uno en particular, es como uno de esos clubs de caballeros que solo estaba abierto a miembros varones y principalmente de clase alta. El West End de Londres del siglo XIX.
Pese a su peculiaridad, cinco valientes mujeres dieron un paso al frente, aunque no fueron muy bien recibidas por los más recelosos. Maria Teresa de Filippis, Lella Lombardi, Divina Galica, Desiré Wilson y Giovanni Amati entraron en la historia de este deporte, a pesar de que solo dos lograron tomar la salida en un Gran Premio: las italianas Maria Teresa De Filippis y Lella Lombardi.
No obstante, también tenemos que hacer un guiño a las chicas que han formado parte como piloto de pruebas en grandes equipos. María de Villota, quien animó a Susie Wolff cuando ya no podía cumplir su sueño por culpa de un accidente: "tienes que hacerlo por todas nosotras", le dijo; Simona de Silvestro y Carmen Jordá, actual piloto de desarrollo del equipo Lotus F1 Team.

Maria Teresa de Filippis (Nápoles, 1926 – Bérgamo, 2016†)

La napolitana De Filippis ya contaba con algo de experiencia en los deportes de motor y se inscribió en el Mundial de 1958 a los 38 años, una edad normal en aquellos tiempos. Aquel año condujo el coche con el que Juan Manuel Fangio ganó el título de pilotos en 1957, y llegó a participar en cuatro carreras. En el segundo Gran Premio salió a la calificación y consiguió un meritorio décimo puesto en la parrila. Sin embargo, no le permitieron competir en el Gran Premio de Francia porque “el único casco que una mujer debe usar es el de la peluquería”.

Lella Lombardi (Frugarolo, 1941 – Milán, 1992†)

Lombardi fue la única mujer que ha conseguido puntuar en un Gran Premio. Fue en la última edición del GP de España en Montjuïc (1975), donde entró sexta, pero sólo logró medio punto. La carrera fue detenida antes de tiempo por el mortal accidente provocado por Rolf Stonmelen y cuya consecuencia fue que no se volviera a disputar ninguna carrera automovilística en este trazado. Lella Disputó un total de 17 Grandes Premios y su debut fue en el Gran Premio de Gran Bretaña de 1974.

Divina Galica (Hertfordshire, 1944)

Participó en los Juegos Olímpicos de Invierno de 1964 (con solo 18 años), 1968 y 1972 en las disciplinas de esquí y eslalon, donde consiguió el récord de velocidad (199,5 km/h).
Tras su periplo como atleta olímpica, Galica debutó en el GP de Gran Bretaña de 1976, la última carrera de Lella Lombardi. Logró correr contra los grandes en la Carrera de Campeones, una prueba no puntuable disputada en Brands Hatch; y en el International Trophy de Silverstone. Intento calificarse en dos GP más, pero no hubo suerte.

Desiré Wilson (Brakpan, 1953)

Por aquel entonces se sabía de la existencia de algunas carreras fuera de campeonato y Desiré tomó parte del Campeonato Aurora de F1 (hecho para coches artesanales o de temporadas pasadas), que se disputaba en Gran Bretaña. Precisamente, Wilson ganó una carrera de este certamen (Brands Hatch, 1980), convirtiéndose así en la única mujer que puede decir que ha ganado en la F1. También logró correr en el GP de Sudáfrica de 1982, pero la guerra entre FIA y FOCA hizo que la carrera no fuera puntuable.

Giovanna Amati (Roma, 1959)

Mujeres en la F1 Giovanna Amati

Amati no logró clasificarse con el Brabham-Judd

© Rainer W. Schlegelmilch/Getty Images

Principalmente por razones económicas, Amati consiguió en 1992 el segundo monoplaza del agonizante equipo de F1, Brabham-Judd. Amati se bajó del Brabham sin poder calificarse para el GP de Brasil, que se disputaba al día siguiente.
Fue la tercera y última tentativa de la piloto romana de correr un Gran Premio. Curiosamente, su coche fue heredado por Damon Hill, en lo que sería el primer coche del británico en la F1. Hill sólo consiguió calificar el Brabham para dos grandes premios en ocho intentos.