Una de las mejores cosas de aprender un idioma es la posibilidad de insultar a la gente en otra lengua. ¡ Es una pasada!
Por ejemplo, hablemos de nuestra lengua materna, el español. ¿Cómo lo aprende el resto del mundo? Pedir una cerveza o hablar con alguien en la playa está bien y es algo sencillo, aunque seguro que, desde el punto de vista de un extranjero, no hay nada más divertido que decir palabras mal sonantes en español.
Aquí abajo tienes unas lecciones del español más bestia para extranjeros (o no).