Si eres aficionado al pádel, seguro que en algún momento de tus ratos de ocio habrás sujetado una pala de pádel. Y es que el pádel ha irrumpido con fuerza en el mundo del deporte, sobre todo en el estrato más amateur. El hecho de ser un deporte muy accesible y fácil de practicar, ha hecho mella en la sociedad. El número de practicantes se ha multiplicado en pocos años, lo mismo que el de las pistas de pádel. Y es que, para practicarlo, basta prácticamente una pista, una pala, una bola y unas buenas zapas. ¡Aquí van algunos datos sobre la historia del pádel en el mundo!
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¿De dónde viene su nombre?
El nombre de pádel procede del inglés y la palabra "paddle", que significa “pala” o “raqueta”, término que se españolizó hasta incluirse en el Diccionario de la Lengua Española (RAE).
- PÁDEL. Del ingl. paddle tennis.
- Adaptación gráfica propuesta para la voz inglesa paddle (tennis), ‘deporte parecido al tenis que se juega con palas de madera’: «Zonas comunes con jardines, piscinas y pistas de pádel» (Mundo [Esp.] 23.3.01) // Juego entre dos parejas, muy parecido al tenis, pero que se juega entre cuatro paredes y en el que la pelota se golpea con una pala de mango corto.
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Nacimiento del pádel
Las raíces del pádel se remontan a sus predecesores deportes de raqueta, como el Platform Tennis (o tenis de plataforma), que se originó durante la década de 1920 en Scarsdale, un suburbio residencial al norte de la ciudad de Nueva York. La idea original de sus creadores (James Cogswell y Fessenden Blanchard) era instalar una cancha para la práctica del bádminton o voleibol durante los meses invernales. Sin embargo, las dimensiones del terreno de que disponían no eran apropiadas para ello, así que optaron por una solución alternativa, dando lugar a lo que hoy conocemos como Platform Tennis. Este nuevo deporte se jugaba en plataformas elevadas, generalmente durante el invierno, e incluía sistemas de calefacción bajo la plataforma para derretir la nieve. Al igual que el pádel, utilizaba palas sólidas y una red circundante, aunque el tamaño de la cancha era menor (1/3 de las dimensiones de una pista de tenis) y se utilizaba una pelota de goma esponjosa. Además, la plataforma estaba rodeada por una malla metálica que impedía la salida de la pelota de la pista, al igual que ocurre en el pádel.
Los orígenes históricos del pádel se remontan al año 1969 de manos del empresario mexicano Enrique Corcuera, un gran aficionado al tenis. Corcuera, en uno de sus viajes a Estados Unidos, había probado el "paddle-tennis", un juego inspirado en el tenis pero practicado en una pista más pequeña, con una red más baja y sustituyendo la raqueta por una pala. Lo que hizo Corcuera fue, en base a ese concepto, adaptar un terreno de su propiedad en Las Brisas, Acapulco (México), instalando una pequeña pista de 20 metros de largo por 10 de ancho, a la que añadió paredes a los lados con la idea de evitar que la vegetación invadiera la cancha y, de paso, que las pelotas no se colaran en la finca del vecino. "Probaron con diferentes pelotas observando que la mejor resultaba ser la del tenis. Al rebotar la pelota contra las paredes descubrieron que aquello se volvía más divertido y fluido", explica Omar Villavicencio, presidente de la Federación Mexicana de Pádel (FEMEXPADEL).
Al rebotar la pelota contra las paredes descubrieron que aquello se volvía más divertido y fluido.
Nadie podía imaginar por aquel entonces que aquella improvisada idea daría lugar a un nuevo deporte que terminaría extendiéndose por el mundo.
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Expansión a España
La exportación del pádel a España de nuevo tuvo que ver con Enrique Corcuera quien, durante el verano, invitaba a sus amigos aristócratas a jugar con él en su pista de Las Brisas. El paso de su amigo el príncipe Alfonso de Hohenlohe-Langenburg, promotor inmobiliario y fundador del Marbella Club, fue clave en esta expansión. Él se encargó de llevarlo a España e introducirlo en la Costa del Sol en 1974, construyendo dos pistas en su hotel-club. Estas dos pistas fueron las primeras construidas en España y, a diferencia de la de la casa de Corcuera, en lugar de las paredes laterales, presentaban una verja de alambre.
Las canchas del Marbella Club fueron sede entre 1980 y 1990 de los famosos torneos “Pro-Am”, patrocinados por las tiendas “Smith & Smith” de Las Arenas (Vizcaya), propiedad del que se convertiría en el primer presidente de la Federación Internacional de Pádel (1991), Julio Alegría Artiach, una de las personas más importantes de la historia de este deporte y quien estableció un reglamento de pádel a nivel internacional.
El momento clave en la evolución del pádel en España fueron los años 90, cuando destacadas figuras del ámbito político, empresarial y periodístico se aficionaron a este deporte, lo que provocó que se convirtiera en el deporte de moda del momento. El rápido éxito del pádel atrajo a figuras destacadas del tenis como Manolo Santana. El campeón español empezó a practicarlo con asiduidad y empezó a organizar torneos por la Costa del Sol, convirtiéndose en uno de los mayores impulsores del pádel en nuestro país, donde varios clubes empezaron a construir sus propias pistas.
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Exportación mundial y reconocimiento internacional
Tras ser testigo directo de su éxito, en 1975, Julio Menditengui, amigo argentino de Alfonso de Hohenlohe, decide importar este nuevo deporte a su país. Será en Argentina en donde el pádel obtendrá una importancia sin precedentes hasta convertirse en el segundo deporte más practicado. Nombres como Horacio Álvarez Clementi, Cacho Nicastro y Diógenes de Urquiza, pioneros nacionales, contribuyeron ampliamente a este desarrollo exponencial. Por su parte, muchos jugadores de polo argentinos venidos a España descubrieron el pádel en Marbella y, al regresar a Argentina, se convirtieron en embajadores naturales de este "nuevo juego fácil y divertido que tiene instalaciones baratas".
En 1988, con Óscar “Cacho” Nicastro al frente, se funda la Asociación de Pádle Argentino (APA). Nicastro, erigido como presidente y buscando dar un impulso internacional al juego, llegó a un acuerdo para organizar el primer encuentro entre España y Argentina, dando lugar a otro de los grandes momentos en la historia del pádel internacional.
Además de Argentina, el pádel se extendió rápidamente a otros países del continente americano como Brasil, Uruguay, Chile o Paraguay. Igualmente, su extensión en Europa es un hecho en países como Suecia, Reino Unido, Francia o Alemania, países en los que han ido surgiendo federaciones, logrando un gran éxito en cuanto al número de federados y construcción de instalaciones. España en este sentido, es reconocida como la impulsora del pádel en Europa.
En 1993, el pádel se consolidó como modalidad deportiva, tras su reconocimiento oficial por el Consejo Superior de Deportes. Un año después, se aprueba la constitución de la Agrupación Española de Pádel inscrita en el Registro de Agrupaciones Deportivas del Consejo Superior de Deportes.
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Evolución del juego y equipamiento
A lo largo de los años, el pádel ha sufrido varios cambios en las reglas que han dado forma a su estilo de juego moderno. Un cambio significativo en las reglas fue la introducción del servicio por debajo, cuyo objetivo es reducir el dominio del servicio y mejorar la duración de la jugada, centrando más la atención en el juego hábil. Además, se perfeccionaron las reglas relativas al uso de las paredes, lo que permite que, en determinados momentos, las pelotas se puedan jugar fuera de la cancha, agregando un componente de espectáculo. Esta adaptación ha dado lugar a un juego más atractivo y estratégicamente complejo, que atrae a una audiencia más amplia.
El desarrollo del equipamiento también ha marcado la evolución del pádel; empezando por las palas de pádel que, inicialmente, eran simples palas de madera. Con el tiempo, estos evolucionaron hacia diseños más sofisticados que incorporan materiales avanzados como fibra de carbono y fibra de vidrio, que ofrecen mayor durabilidad, potencia y control. Las pelotas, originalmente adaptadas del tenis, también se han perfeccionado específicamente para el pádel para equilibrar el rebote y la velocidad, mejorando la jugabilidad. Hoy en día, el equipo de alto rendimiento se adapta a los estilos y niveles de los jugadores, lo que afecta significativamente la accesibilidad y el atractivo del deporte.
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Las figuras del pádel
El gaditano Juan Lebrón es el primer número 1 del pádel mundial nacido en España. Lebrón logró este hito en 2019, después de firmar una temporada absolutamente épica, junto a su compañero Paquito Navarro. La pareja ganó cinco torneos: Alicante, Jaén, Valladolid, Bastad y São Paulo. En este último, después de lograr la clasificación para la final, Juan Lebrón se convirtió en el primer número 1 del World Padel Tour nacido en España, liderazgo que revalidó en 2020 y 2021, esta vez junto a otro español, el madrileño Ale Galán. A la dupla Lebrón-Galán se le puede atribuir el mérito de protagonizar la nueva era del pádel moderno. Su asociación les valió nada menos que 33 trofeos y la primera posición del ranking durante cuatro temporadas consecutivas con un estilo de juego de altísimo nivel.
Tanto España como Argentina han sido cuna de algunos de los mejores deportistas de la historia del pádel. En números, el jugador más condecorado de la historia del pádel es, sin duda, el argentino Fernando Belasteguín, que ha conseguido más de 200 trofeos en su carrera profesional, 165 de los cuales formando un equipo icónico con Juan Martín Díaz, otra leyenda de este deporte. Juntos se mantuvieron en lo más alto del ranking mundial durante 13 temporadas consecutivas, con Pablo Lima y Juani Mieres como únicos posibles rivales.
Otros iconos del pádel dignos de mención son Paquito Navarro -conocido por su talento en bruto y sus atributos de showman-, Sanyo Gutiérrez y Maxi Sánchez.
En la actualidad, una nueva generación de jugadores notablemente rápidos y explosivos está tomando el relevo mostrando un estilo de juego más rápido y dinámico, como ocurre con nombres como Bea González, Martita Ortega, Ariana Sánchez y Paulita Josemaría, jugadoras muy físicas y explosivas cuyo éxito ha inspirado a una nueva generación de jugadoras, promoviendo la igualdad en el deporte y destacando la naturaleza inclusiva del pádel, que atrae a todas las edades y niveles de habilidad.
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El crecimiento del pádel
Tras su introducción y su auge en España, el pádel comenzó a extenderse por Europa. Países como Francia, Suecia y, especialmente, Italia, están presenciando de primera mano el vertiginoso crecimiento del pádel. Francia ha ampliado rápidamente su número de pistas y jugadores, apreciando especialmente el aspecto social y la accesibilidad del pádel. Suecia, por otro lado, ha desarrollado una fuerte escena femenina, con numerosos clubes y ligas que atienden específicamente a las mujeres, reforzando la participación femenina y la visibilidad en el deporte.
El pádel también ha experimentado un sorprendente aumento de popularidad en regiones fuera de su tradicional bastión europeo. En Oriente Medio, países como los Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita y Qatar han adoptado el pádel y han construido instalaciones de pádel de lujo como parte de grandes desarrollos deportivos y de ocio. En Asia, países como Japón y Filipinas están empezando a incorporar el pádel a sus culturas deportivas, atraídos por su sencillez y las mínimas necesidades de espacio respecto al tenis tradicional.
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Highlights – Qatar Major Premier Padel
Disfruta de los mejores momentos de la segunda parada de la temporada del Premier Padel: el Qatar Major.
Para ver al pádel en su máxima expresión, puedes seguir el desarrollo del circuito profesional de élite de este deporte, el Premier Padel, que será retransmitido por Red Bull TV durante toda la temporada. Con retransmisión en directo en cada una de las 25 paradas, puedes ver todos los partidos de cada torneo desde los cuartos de final en adelante.
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