El witch house hechizó a la cultura alternativa durante un breve espacio de tiempo. Fue en 2009 cuando nació el más oscuro de los micro géneros, una combinación de ritmos, sintetizadores y guiños al ocultismo y la brujería (witch significa bruja). El witch house se propagó por internet gracias a aquellos que tenían cierta inclinación hacia las zonas más obscuras de la red y hacia el chamanismo.
Durante un corto espacio de tiempo fue el sonido del underground electronic americano, impulsado por bandas como Salem. El periódico británico Guardian lo definió como “un sonido intrigante con samples nerviosos y toques de fantasía”. En poco tiempo llegó a la música de masas, Beyoncé bailó en un anuncio de L'Oréal al ritmo de See Birds, el tema de Balam Acab, artista del sello Tri-Angle. Dos años más tarde, Katy Perry alcanzó el número uno con su single, Dark Horse, que estaba muy influenciado por el witch house. Luego este micro género desapareció con la misma rapidez que había llegado.
El witch house nació hace 10 años y ahora apenas se habla de él, se supone que fue otro sonido efímero como el cloud rap o el nu-rave. Ahora bien, ¿podría ser que el witch house nunca se fuera del todo? ¿Es posible que siga vivo solo que con otros nombres? Esta es la teoría de Travis Egedy, el artista de Nueva York que crea música bajo el nombre de Pictureplane, y al que se considera el inventor del término ‘witch house’.
Travis Egedy, cuyo seudónimo es Pictureplane, nos enseña bajo estas líneas lo que es el witch house.
“El nombre empezó siendo una broma. Lo dije en una entrevista con Pitchfork y se extendió a partir de ahí”, recuerda Egedy. El término se acuñó en una conversación con el artista underground Shams. Se trataba de un juego de palabras a partir del término “house music”, aunque luego el witch house no tuvo nada que ver con la cultura de clubes nocturnos.
“En esa época había lo que yo llamaba 'rainbow rock': artistas que empleaban mucho colorido en su música, como Animal Collective y Dan Deacon”. El witch house, con sus sonidos espeluznantes y sombras visuales fue justo lo contrario. “Se convirtió en una nueva estética dentro de la música electrónica underground. Era algo oscuro, mientras que el rainbow rock no era nada oscuro”, dice Egedy.
Los críticos se reían, a pesar de que era una música seria e increíble.
Esta estética fue seguida por un montón de artistas caseros que utilizaron plataformas como MySpace, de pronto podían hacer música en casa gracias al software pirateado. “Fue una explosión. Había una increíble red de raves y shows a lo largo de América. La gente estaba haciendo música en su dormitorio con sintetizadores y un nuevo software. Era algo fácil”, apunta Egedy.
Cualquier chaval podía bajarse una versión pirateada de Fruity Loops o Reason. Ocurrió en todos los ámbitos. Si eras un joven productor de rap, ya no necesitabas un Akai MPC, lo podías hacer con el ordenador de tu madre”, añade Bryan Kurkimilis, integrante de la banda de witch house White Ring.
El resultado fue una generación de músicos que podían explorar nuevos territorios. En las generaciones anteriores para grabar había que ir a un estudio y pagar a un caro ingeniero. Cada hora era muy valiosa y no había un segundo para la experimentación. Los jóvenes, trabajando desde casa con su software que se habían bajado gratis, podían probar cualquier cosa “y al mismo tiempo conservar el alma de las bandas que les habían servido de inspiración”, dice Kurkimilis.
El witch house coincidió con el momento álgido de Tumblr y la comunidad gótica. Egedy se refiere a este micro género como “un caos de magia, libertad y anarquía”.
No éramos magos con túnicas negras y pentagramas.
Además de Salem, hubo otras bandas que triunfaron como Holy Other, Purity Ring, oOoOO y los londinenses Crim3s. The Guardian, The New York Times y otros empezaron a hablar de un nuevo tipo de música electrónica basada en el ocultismo pero nadie sabía dónde estaban las fronteras del género. ¿Era The Haxan Cloak un artista de witch house? ¿Qué se podía decir de Clams Casino, el productor de A$AP Rocky? Por otro lado, los medios de comunicación no se enteraron del sentido del humor que llevaba implícito este movimiento.
“No era nada pretencioso. Simplemente nos estábamos divirtiendo. Era un burla. No éramos magos con túnicas negras y pentagramas”, dice Egedy.
Los periodistas sospechaban un poco de los artistas de witch house que tenían nombres como GL▲SS †33†H y ///▲▲▲\\\. “La gente no sabía si tomárselo en serio. Los críticos dudaban, se reían a pesar de que era una música seria e increíble. Ejercieron una resistencia hacia el movimiento”, recuerda Egedy
El caso es que el sonido encontró su público. Salem se convirtió en un grupo de culto y su música formó parte de las bandas sonoras de películas de Ryan Gosling y del programa Skins de adolescentes británicos. Crystal Castles, que utilizaron mucho el sonido witch house, tuvieron mucho éxito como banda indie, colaboraron con Robert Smith de The Cure y acabaron en la lista de los mejores álbumes de la década de la revista NME. En 2012 este movimiento había borrado los brillantes neones del nu-rave y del ‘rainbow rock’, extendiendo una negra sombra entre los sonidos indie y la música electrónica underground.
Con el tiempo el witch house fue desapareciendo para ser reemplazado por el seapunk, el nuevo micro género promovido por Tumblr. Pero Egedy asegura que su influencia permanece y fue clave en el álbum Yeezus que Kanye West sacó en 2013. De hecho, Black Skinhead, el single más importante de ese trabajo fue coproducido por Jack Donoghue, integrante de Salem. El witch house sigue vivo en el hip-hop actual, como queda de manifiesto en las canciones de Travis Scott y Danny Brown.
“Veo que tiene una enorme influencia en el rap actual. Los beats oscuros, el contenido lírico… Salem ha tenido una gran influencia en lo que oímos hoy”, apunta Egedy.
Kurkimilis está de acuerdo en la influencia de este movimiento en el hip-hop actual. Los artistas de witch house se inspiraron en pioneros del rap y en grupos como los Cocteau Twins. Al mismo tiempo, el rap ha acabado inspirándose en el witch house. “Todos los músicos de witch house crecieron escuchando hip-hop. De una manera extraña, es una forma de apropiación cultural, tomas algo que amas de verdad y le das un toque propio”.
Pero el witch house no ha influido solo al hip-hop. “Lo ves en todos lados. En bandas sonoras y en artistas pop como Billie Eilish. Lo único es que las ideas originales se han desarrollado y transformado”, añade Kurkimilis
Tiene sentido que se haya preservado, pues después de todo el concepto del witch house es tan tentador ahora como hace una década. Nace de la idea de que “la realidad es mutable. Cada uno puede crear su propio mundo y realidad”, asegura Egedy. Quizá el nombre, el término, no ha sobrevivido, pero su tenebroso sonido se sigue escuchando en la música contemporánea proporcionando una oscuridad en la que perderse.