Desnivela está lista para dejar su huella en el Freestyle Competitivo
Cómo, cuándo y porqué te empezaron a llamar Desnivela?
Estaba en una batalla y [mi oponente] me empieza a tirar. Y siempre me decía “tú no tienes nivel.” Y un día se me salió rapeando y le dije “No es que no tenga nivel, es que soy quien te de. Y yo dije “Wow, eso sonó chévere”. Y tuve unos nombres, diría yo que bastante suavecitos. O sea, al principio tuve un nombre todo raro como Catmi, por mi nombre de Camila. Y no me gustó. Desnivela, ese nombre ya lo tengo hace rato. Tengo desde el 2015 llevo batallando ya con ese nombre.
Vale, y cuéntanos cómo empezó tu amor por el freestyle.
Pues todo empezó porque mi tío le gustaba como la música urbana. Como el rap de ese tiempo, como tipo 50 Cent y toda esa vuelta, en inglés, más que todo. Yo era muy niña y me gustó ese ritmo, me empezó a gustar ese tipo de música. Y luego mi tío, otro tío que es como más cerca de mi edad, tiene como 27, 28 años. Él empezó a escuchar rap, pero en español. Entonces escuchaba a Nach y escuchaba puro rap de España, la verdad. Y me gustó. Yo dije “hey, esto se hace en español”! Entonces a mí como que me causó intriga. Y luego me salió una batalla de Mestiza y Neblina en el parque. Y pensé, esto es lo mío.
Osea, nunca lo había visto. Mi intención era buscar mujeres cantando música rap, y pues lo que me salió fue eso y me gustó mucho. Eso fue como en el 2002 y ellas hicieron una canción que se llamaba “Respetense” lo cante en la escuela. Estaba súper enpeliculada desde que las vi, me encantaron…
Eso fue hace mucho, ya más de diez años, estabas bien pequeña.
Sí. Estaba muy chiquitica. Escuché la música y me gustó pero cuando vi a las nenas haciendo freestyle, me impactó. Fue como que yo llegaba al colegio, decía “la profesora es muy fastidiosa, yo soy la mejor haciendo prosas”, y mis amigas me celebraban [ríe] y decían “vamos a hacer música con Arcángel” y no sé qué.
Y quiénes son tus inspiraciones en esta arena de la música, ya sea freestyle, o reggaetón y rap?
Bueno en las batallas, tengo bastante inspiración femenina a la hora de batallar y también al escribir temas. Por ejemplo, a nivel freestyle, pues yo soy una real fan seguidora de lo que es el freestyle de las mujeres colombianas, la verdad. O sea, son muy buenas. Marithea es la Reina del Mundo, ella es la reina actual. Y también soy muy seguidora de Kim. Vi sus batallas de cuando era más chica, ella es venezolana también, entonces también me gusta bastante como el estilo que ella tiene. Entonces Kim fue la primera mujer en ganar una Red Bull Batalla Nacional. Pues, entonces ella me parece como super inspiradora porque es la que rompió el estigma de que el hombre solo rapeaba en batallas y que aparte era una representación conocida a nivel hispanohablante, por decirlo así. [Tambien] tengo muchas amigas que son muy buenas… Yo pienso que en Colombia hay como un boom del freestyle ahorita, porque todas rapeamos hace rato.
Y afuera del freestyle, me gusta lo que hace Azuky, ahorita ella está como haciendo algo cool con el freestyle. Eso es un mundo totalmente diferente de la música; no escucho música de ninguna de las freestylers.
También escucho mucho a las colombianas. En Colombia ahorita hay un auge de mujeres que están partiendola durisimo y hay una que se llama Lee Eye, es rola y ella hace como un tipo de rap con dembow, con jazz, como reggaeton, como de todo. Ella canta, es super genial. Que no sea de mi país, me gusta mucho lo que hace ahorita Nathy Peluso, porque dice “una perra, sorprendente”. Me gusta que se tenga su estilo raro y no le importa nada. Ellas son las que más escucho, sobre todo antes de ir a batallar.
¿Quién mas está en tu line-up de motivación antes de ir al escenario?
En realidad a quien yo veo antes de ir al escenario es a Cabrón y Cambra. Es un estilo de batalla que me gusta mucho. Son españoles, son buenísimos. O sea, yo miro una batalla de ellos y me dan ganas de batallar.
Cómo quedaste este año en el mundo de Red Bull? ¿Qué fue lo que te llamó la atención de Red Bull Batalla y por qué?
Pues, las batallas de acá de Estados Unidos realmente me interesaban mucho en Colombia, porque tenía muchas ganas de superarme, como de alcanzar esa siguiente fase. Digamos que llega un punto en el que tú quieres averiguar de dónde sale esto y resulta que todo eso es de acá, es de Estados Unidos: el rap y el freestyle. Y sentí como un hambre voraz como por conocer, sentir que se sentiría batallar acá. Y además de eso, mi plan es seguir batallando acá en Estados Unidos, en las batallas, digamos por ejemplo, hispanohablantes, pero mi finalidad es llegar a aprender inglés para poder participar en batallas en inglés.
Eres la primera mujer en competir en las finales. ¿Cómo se siente saber que eres la primera en llegar a ese punto?
Pues para serte sincera, fue muy explosivo para mí, porque yo venía como con esa hambre que te digo de Colombia, porque en Colombia prácticamente me subí a exhibiciones en las tarimas más grandes. El que ganaba la regional de Street Warriors para ir a la nacional de Street Warriors, podía ir a la exhibición con FMS y me subí a FMS. Incluso estuve en unas clasificatorias de Red Bull Batalla, pero nunca había podido clasificarme en una nacional. Para mí era como que, “yo quiero clasificar en la Nacional Final de Red Bull. Lo necesito, lo quiero”... y no se me daba. Lo intenté como por cinco años en Colombia y no se me daba. Y yo decía ¿por qué no se me da?, y yo pensé: debe ser que algo estoy haciendo mal aquí en Colombia y tengo que regenerar mi mundo en el lugar en el que nació el rap. Y dije: voy a Estados Unidos.
Iba a todas las batallas llegué con esa hambre y también aquí me pasaba como que los manes no podían creer que había una nena que rapeara.
Y un man que es el duro de Los Ángeles, que se llama Boss me escribe y me dice “Desnivela, vamos a hacer un team para representar a California, con Los Ángeles…”. Osea, para mí fue como que uy, qué chévere, porque no me he ganado nada, pero él se dio cuenta de que yo rapeo chimba. Para decirme a mí, de todos mis compañeros. A seis horas yo vivo en carro. Entonces dije ok, yo estoy haciendo las cosas bien, no me voy a frustrar porque normalmente me frustraba y no volvía a la competencia y me iba a otro lado.
[En los regionales de Los Ángeles] 54 hombres se inscribieron y una mujer, y dije “ve***a, voy a ganar porque quiero ganar”, pero cuando gané fue que me dijeron “ay, sabes? O sea, acabas de marcar historia” y yo “como así que acabo de marcar historia? Yo no le entiendo.” Y la gente me decía sí, ninguna nena se ha subido nunca a una nacional, se clasificaron para las regionales, pero nunca se pudo clasificar ninguna nacional. Y yo, “what?”
Mi meta era personal, yo decía “llevo seis años detrás de un título de Red Bull, tengo que ganar.” Y cuando me dijeron eso fue como que mi cabeza me dijo: cuando uno espera demasiado algo y le invierte a algo sin rendirse, a veces uno cree que encontró la victoria y realmente es una victoria gigante. Todos mis compañeros me decían “tú has cambiado la historia y tal, ya eres la pionera.”
¿Cuéntame cómo te preparaste para las finales y cuáles fueron algunos de tus pensamientos cuando estabas ahí?
Bueno, la verdad que para la final y para la nacional no entrené porque los amigos con los que iba a entrenar como que estaban muy ocupados. En realidad, todo mundo acá se bajoneó. Sí, porque obviamente todos queríamos ganar. Entonces todo mundo como que se bajoneó y entonces me tocó rapear acá en la casa todo el tiempo, escuchar música, me relajé, como que estuve tranquila y no traté de presionarme tanto.
¿Qué sientes que aprendiste? O sea, ¿Cuál fue el momento que te marcó y te hizo crecer como freestyler y como persona en esta experiencia?
Pues en realidad yo siento que esta experiencia le he tenido un miedo bonito, porque me ayudó…digamos que de cierta manera yo considero que yo soy alguien un poco triste y como que no me gusta hablar mucho con la gente. Me guardaba mucho las cosas y como que el freestyle me permitió decir lo que sentía, lo que les quería decir. O sea, como que si alguien me estaba haciendo daño a mí, yo me cohibía de decirle “ay, por favor, no lo hagas más”. Entonces, cuando estoy en una batalla, o freestyleando, o rapeando y hago una canción, digamos que puedo soltar eso y seguir. Como que es una herramienta, no sé cómo definir eso, pero como que te ayuda a soltar. Entonces también a veces cuando me enamoraba de alguien, les escribía una canción y cantaba esa canción hasta que me sabía culo y ya no quería cantar la canción. Y cuando ya no quería cantar la canción, ya no quería a esa persona, por decirlo así. Entonces sí, es como una herramienta de transformación.
¿Y cuáles son tus aspiraciones ahora? ¿Qué deseas hacer ahora? ¿Cuál es tu visión para tu futuro?
Pues en realidad yo quisiera hacer música, quisiera vivir de la música. El freestyle me gusta, es una adrenalina súper divertida que yo creo que no voy a dejar de hacer en muchos años. Yo creo que por ahí hasta que cumpla 30, yo creo que dejaré de estar por ahí en las plazas. Me gustan mucho las batallas, pero en realidad si quiero hacer música, quiero vivir de la música, quiero dedicarme como a producirme, como a instruirme musicalmente. Quiero investigar y meterme en otros mundos, como que intentar hacer otras cosas. Pero no tengo un plan B, pues, quiero mantenerme en esto.
Qué bueno. ¿Qué tipo de música te interesa hacer?
Pues actualmente estoy haciendo drill. Me gustaría hacer algo más así. Me gusta la música muy under y me gustaría hacer algo de reggaetón, como el tipo de reggaetón que escucho de la muchacha que te digo de Colombia. Me gusta ese tipo de música que es como movidita. Me gusta más la música de antes. Eso es como Nicki Nicole, como que ella canta cosas más bonitas, como más melódico. Algo así. Me gustaría investigar… no hacerlo, pero ver cómo me iría. Obviamente, yo quiero seguir haciendo rap y haciendo trap, dancehall también.
¿Cuáles son tus esperanzas y tu visión para las mujeres en este espacio de freestyle? ¿Y también, qué le dirías a mujeres que tienen esa aspiración de llegar tan lejos o más aún en este espacio, y Red Bull Batalla específicamente.
Pues les diría que va a parecer difícil siempre, con el simple hecho de ser mujeres. Aunque traten de vendernos una idea de igualdad y equidad, es algo errado. Y el simple hecho de que una mujer haya querido hacer freestyle, lo único que yo le puedo decir es que lo intente mucho. Porque es que a veces pasa que das con lo que te gusta y a los dos años se te da, pero también pasa que lo intentas y han pasado diez años y no consigues el logro que quieres en tu vida. Entonces, yo diría que si realmente te gusta, tienes que hacerte matar por eso, porque las batallas son así. Esto es una batalla, entonces hay que solamente saber que nos gusta y si nos gusta, pararnos fuerte porque son palabras y podemos dar igual que los hombres. Además, las mujeres hablamos más, entonces todas tenemos un pro.
O sea, yo lo digo riéndome. Bueno, yo incluso lo he dicho en una batalla, “mano, pero si las discusiones siempre las ganamos las mujeres, que vas a ganarme una batalla a mí”.